La luna muere en tus ojos
Y mi cuerpo se abre como tierra
En el arado.
Húmeda y fresca mi carne
Espera tu semilla improbable y marchita
Lloras
Escondiendo la cabeza
Entre las plumas de los ángeles
Maldices
El barbecho de mi fértil vereda
Que no colmará tu sangre de viejo
Huyes
Lecho arriba de mi fuego
Con la desesperanza viscosa de la serpiente
Y en tu derrota, el consuelo de tus manos
Cosechando mi sexo
Y mi cuerpo se abre como tierra
En el arado.
Húmeda y fresca mi carne
Espera tu semilla improbable y marchita
Lloras
Escondiendo la cabeza
Entre las plumas de los ángeles
Maldices
El barbecho de mi fértil vereda
Que no colmará tu sangre de viejo
Huyes
Lecho arriba de mi fuego
Con la desesperanza viscosa de la serpiente
Y en tu derrota, el consuelo de tus manos
Cosechando mi sexo
3 comentarios:
un saldo ruín: el capital, por sus años vencido, se ha hecho acreedor de otra victoria.
como te dije antes (creo que fui yo y no otra, pero es igual), me encanta tu blog, y es un encanto metafísico.
E.
hola, qué bueno cruzarnos, me gusta tu blog
luego vuelvo con calma
Leo y releo buscando qué decir que trascienda lo fútil y siempre queda un wow!
Wow!
OA
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