Me gusta el silencio
y todavía más el aullido de los lobos.
Pues había un lobo blanco que venía a esperarme
todos los inviernos
y dejaba sus pisadas en la nieve.
Yo lo seguía obediente,
porque él lo era todo para mí,
hasta que un día dejó de nevar
y perdí su rastro.
Ahora imagino los paisajes blancos
que nunca llegaré a contemplar,
hollados por manadas de lobos hambrientos.
Mientras, me pudro despacio…
en esta habitación sin ventanas.
y todavía más el aullido de los lobos.
Pues había un lobo blanco que venía a esperarme
todos los inviernos
y dejaba sus pisadas en la nieve.
Yo lo seguía obediente,
porque él lo era todo para mí,
hasta que un día dejó de nevar
y perdí su rastro.
Ahora imagino los paisajes blancos
que nunca llegaré a contemplar,
hollados por manadas de lobos hambrientos.
Mientras, me pudro despacio…
en esta habitación sin ventanas.
12 comentarios:
lobos enjaulados en celdas de ciudades...
intuiciones de lo que fuimos y de lo que quizá un día seremos
... al fin con ventanas
Me encantaría haberlo escrito yo :). Un abrazo, gracias por tu visita.
Lo que se perdió...
Me gustó.
Me dejó un sabor extraño.
Un abrazo
a mi también me hubiera gustado escribirlo yo. ¿Quién eres aire comprimido? ¿Una cita textual?
Suena triste pero muy bonito, cargado de fuerza. Besos.
Estoy seguro que él puede encontrarte!
también me gustan los aullidos
Me gusta el silencio pero me pudro despacio...
La voz se busca, se interna, se devela y extraña. Cosa seria lidiar los deseos.
OA
El silencio es una palabra que el lenguaje no puede con él...
un abrazo
Un abrazo silencioso, monique.h
A mi también me gusta el silencio y los lobos que desaparecen con el calor
saludos
un ¿saludo?
Es 2009,
OA
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